sábado, 30 de mayo de 2015

Hola Miguel...

Tengo mono, mucho mono de pillar la bici, la mudanza me ha tenido ocupado mucho más del tiempo del que realmente dispongo y he tenido que conformarme con salir un par de veces a correr, lo cual tampoco estuvo mal, ya que no he sentido molestias en mi tobillo averiado, parece que la bici lo ha ido fortaleciendo. 

Bueno, pues el caso es que el finde pasado, con mi niña y Yaiza nos fuimos a dar un paseo por la Test the Best, y no, no probé ninguna de esas super maravillosas bicis que te dejan las grandes marcas previa inscripción, pero nos encontramos con uno de los grandes de la bici...

Momento de respuesta al... "Hola Miguel"
Allí tuvimos a Miguel Indurain de la mano de Shimano para realizar una demostración de la adaptación de las zapatillas Custom Fit, y claro esta, sacarle una foto de frente con la de gente que había era misión imposible, así que me colé por uno de los laterales, prepare la cámara y lance un familiar... "Hola Miguel", a lo que se giró tratando de identificar a la persona que lo saludaba tan cordialmente y... Clic, instantánea sacada.

Dejando de lado la anécdota comentar que aquello estaba abarrotado. Nosotros nos dejamos caer el sábado y llegaríamos cerca de las doce y desde que entras a Cercedilla ya se empieza a respirar MTB por doquier. Bicis para arriba, bicis para abajo, culotes y maillots de colorines por todos los lados, y diría incluso cientos de banderines de las diferentes marcas que exponían.

Estampa de Cercedilla con el área dedicado a Test the Best
Nosotros entramos por la parte de abajo, dejando a un lado el circuito de la prueba infantil, donde se concentraban diferentes tiendas y marcas con expositores para la venta de componentes y accesorios, y pude aprovechar para pillar una maillot cortaviento muy técnico y regalado como quien dice y una camiseta, que aún siendo más de running la sacaré más provecho para el viaje de este verano, ya que es muy visible y de manga larga.

En esta tienda "Alicantina" fue donde pille mis gangas
Y también había un pequeño hueco para las curiosidades donde se mostraban algunas de las bicis que probablemente tuvieron muchos de los visitantes, a mi me llamo la atención una Orbea que tenía el sillín parecido a mi BH Bicicros.

Orbea Furia-2
Era curioso pasear por allí, de repente te encontrabas a alguien sobre una bici de las que van pedaleando tumbados junto al suelo, o se veía a un chaval con una de esas de ruedas gordas, gordas, pero que muy gordas.

Fat Bike
De la parte de "las compras" nos fuimos a la de arriba donde las marcas de prestigio ofrecían sus bicis para testear, eso si, como dije antes, bajo previa inscripción en la Web oficial del evento. Yo creo que para la siguiente edición habrá que organizarse para poder probar alguna máquina de esas impresionantes, lo malo es que seguro que me gusta y eso puede ser un problema.

Una de tantas marcas de las que ofrecían para prueba sus bicis
Después de curiosear entre los pasillos que conformaban los distintos stand decidimos buscar un sitio donde comer y justo nos encontramos con la salida de la prueba no competitiva que celebra este evento todos los años. En breve buscaré los tracks subidos a wikiloc para hacer el recorrido.

Salida de la prueba no competitiva
En definitiva un evento que no dejaría de recomendar a cualquier aficionado al MTB, donde puedes encontrar alguna compra de interés, probar una bici con características similares a esa que tienes entre ceja y ceja o simplemente por darte el capricho de montar en una máquina con la que algunos no podemos casi ni soñar.

Seguro que en la siguiente edición Ruedas a Paseo podrá poner su trazado sobre los circuitos de test, como mínimo.

Hasta pronto.

lunes, 11 de mayo de 2015

No gano para cámaras...

Hoy el día se salvo gracias a la buena compañía, de lo contrario hubiera sido para quedarse en casa. Ya el comienzo no fue bueno, para empezar algo pasó con el despertador que no sonó y nos levantamos como cuarenta minutos más tarde de lo previsto y encima Yaiza no se encuentra muy bien y decide quedarse para no empeorar, para colmo la rueda delantera esta pinchada por lo que encima tengo que emplear tiempo en sustituir la cámara.

Con el tiempo súper justo dejo a Yaiza en su casa y me dirijo hacia el Paular. No tengo muy claro el punto de encuentro y dejo el coche en el parking que hay antes de la entrada al Puente del Perdón, resulta que al final la gente está en el mismo aparcamiento de la entrada del Paular, por lo que con la bici ya montada me voy hasta allí.

Aparcamiento del Paular
Nada más llegar al punto de encuentro me encuentro con Oscar y un montón de gente que no conozco preparando las bicis para salir, intuyo que la mayoría de Bici-Glotones, luego van apareciendo alguna que otra cara con la que sí había coincidido en alguna ocasión. Aquí la sorpresa de unos y otros fueron unas sandalias para montar en bici "con calas" de las que pongo foto abajo para que las veáis.

Sandalias Shimano con calas
Al final llegan Eugenio, Millet y Anita, compañeros de rutas de otras ocasiones, reparto de saludos, montan las bicis e iniciamos la ruta.

Camino de la izquierda tras el Puente del Perdón
Tras el Puente del Perdón y cual embudo vamos cruzando de uno en uno por el estrecho paso que da acceso al camino de la izquierda que nos lleva hasta Rascafría, al otro lado de esta población tomamos los caminos que en continuo ascenso y durante más de once kilómetros nos llevarán hasta una caseta forestal donde está todo el grupo esperando a los rezagados.

Parte de esta subida la hago seguido muy de cerca por Anita, jajaja, podría calcular exactamente en todo momento la distancias a la que la tengo ¡No para de rajar! Se nota que va sobrada y más con la bici que la han dejado, lo que viene siendo un pepinaco de carbono tope de gama.

Subida hacia la casa forestal
Aquí aprovechamos para tomar unas fotos y contemplar las vistas, y después de un buen tiempo de reposo decidimos continuar, cuando... ¡¡Mierda!! ¡Tengo la rueda delantera pinchada! Así que nos vemos obligados a prolongar otro rato más la parada mientras sustituimos la segunda cámara del día.

Foto junto a la casa forestal
Empezaba la bajada, y desde atrás voy adelantando a unos y otros y... ¡¡Mierdaaa, otra vez!! Ahora la rueda de atrás, mucho me temo por la manera de bajar que fuese un reventón ¡No me lo puedo creer! Los compañeros que había adelantado van pasando y les voy preguntando si tienen cámara de 29, al final me socorre Millet prestándome una de las suyas. Voy por la tercera cámara del día, ya unos y otros van diciendo que mejor haberme quedo en casa.

Seguimos el fuerte descenso, formamos al inicio un grupo de cuatro personas que bajamos como si los frenos no existieran, aunque en alguna curva tengamos que decelerar usándolos en su más mínima expresión, hasta el punto en mi caso, de acariciar el mismo filo del camino derrapando con la de atrás para poder enfilar correctamente la curva, llegando a superar en algunos tramos los 62 km.

Vamos tan emocionados que nos saltamos un desvío, por supuesto y dado el día nos metemos por el punto que no es, y al cabo de un rato suena el teléfono de Nieves, es Anita advirtiéndonos de nuestra confusión, tenemos que regresar y esto nos supone añadir cuatro kilómetros más a nuestro track.

Pradera donde se sitúa el Monumento al Guarda Forestal
En poco tiempo nos presentamos en el Monumento al Guarda Forestal, este esta situado en una gran pradera con unas vistas de impresión. Aprovechamos para hacer una parada de avituallamiento. 

No todo va a ser pedalear
 Hacemos unas cuantas de fotos de grupos y decidimos continuar la ruta y justo al kilómetro me doy cuenta de que no llevo puestas las gafas de sol ¡¡Otra de mierda!! ¡Me toca volver porque sé que las he dejado en un poyete del monumento, allí están, vuelta y a la caza de la compañía, que me están esperando en un punto tras cruzar la M-608, de ahí continuamos hasta el puente de la Angostura.

Para otra vez que pasemos por este punto de la M-608 le dedicaré unos segundos a la Casa de la Horca, la cual he visto a la hora de subir la ruta a Wikiloc y no me he percatado en el descenso, ya que se encuentra tras una arboleda, tratando de pasar desapercibida a nuestros ojos, la que un día fue el final de ruta de muchos reos. Hoy en día y desde hace más de un siglo esta casa pertenece a la Sociedad Belga de los Pinares del Paular.

Puente de la Angostura
La senda principalmente de descenso que tenemos que abordar ahora es bastante técnica debido principalmente a las raíces y piedras que la invaden durante todo su trayecto hasta el punto de tener zonas de camino trazadas directamente sobre la piedra.

Tramo del camino trazado sobre la roca
Esta senda obliga a sacar toda la técnica y ponerla en práctica sin permitirte dudar ni un segundo, ya que en tal caso termina siendo obligado echar el pie a tierra bien por la fuerte pendiente en descenso provocadas por los surcos trazados por los arroyos que descienden por la ladera, o por las pequeñas cuestas sobre el minúsculo camino surcado por las raíces.

Embalse de la Presa del Pradillo
Luego pasamos por el área recreativa de la Isla, y poco después por el de las Presillas, terminando los tres que ahora íbamos en cabeza en el aparcamiento del Paular. Esperando al grupo estiro un poco, y decido ir a por el coche que le tengo en otro parking, al regresar me comenta Nieves que se han quedado todos a tomar algo en el área recreativa de las Presillas y total que para rematar el día, cuando quiero llegar ya se han ido todos y me quedo sin poder disfrutar de una buena cerveza bien fría, así que me toca regresar al menos para despedirme de ellos.


Posdata: Al bajar la bici del coche ya en Villalba descubro que... ¡La rueda delantera esta pinchada!¡La cuarta cámara del día!

Hasta la próxima que saquemos nuestras ruedas a paseo.

domingo, 10 de mayo de 2015

Ruedas a Paseo en las Jornadas de los Grandes Viajes

El viernes lo teníamos comprometido con otros quehaceres, por lo que solo fuimos el sábado, eso sí, todo el día. A las conferencias de la mañana Yaiza, Ibi y yo. Antes de la hora de inicio ya estábamos allí, por lo que nos deleitamos con la exposición fotográfica.

Exposición colectiva de fotografías de viajes
Unas fotos por lo general geniales, algunas especiales que transmitían mucho más que la propia imagen en si, en especial los retratos, donde la fisionomía, mirada y el resto de detalles te dan un montón de información, que probablemente cada uno podamos percibir de forma diferente.

 Al cabo de rondar un rato por allí descubrimos que la entrada obtenida por Internet la teníamos que cambiar por otra entrada que los propios organizadores te dan.

Su control de aforo de asistencia al parecer, ya que independientemente de las reservas realizadas pretendía llenar la sala con todos aquellos que se pasaron por allí sin ella, claro esta en sustitución de los que tras obtenerla en la Web no acudieron finalmente.

Entramos en la sala, las primeras filas están reservadas para los ponentes y VIPs, las siguientes inmediatas ya llenas. Buscamos un sitio para tres por la parte central y tomamos nuestros asientos. Al poco rato la sala se cierra restando ya muy pocas butacas por ocupar.

Realiza el presentador de las jornadas una breve introducción y presentación de cada uno de los patrocinadores y colaboradores y da paso al primer conferenciante.

Jorge Sierra de un modo fluido, natural y muy ameno nos narra su vuelta al mundo durante cuatro años a lomos de Naranjito (Un 2 Caballos). Aún centrándose en las partes negativas consigue captar la atención de todo el auditorio con sus aventuras y desventuras.

Luego la ponencia de Rubén Señor y Lucía Sánchez, quienes sacan partido de su experiencia en el mundo del marketing y los anuncios para preparar su material y transmitírnoslo.

Rubén y Lucía en la segunda ponencia del día
Después nos presentan el proyecto de Sonrisas Nómadas, donde a uno le llega el altruismo con el que algunos plantean su modo de vivir y donde te das cuenta que al final reciben más de lo que dan sin buscarlo.

Hacemos un descaso de dos horas para comer, y a la tarde llegan nuestros amigos Pablo y Cristina. Se inician la segunda parte de las jornadas con la entrevista de Carmen Teira por parte de María Eulate, un modo diferente de transmitirnos al auditorio las vivencias de una gran viajera.

Primera Ponencia de la tarde.
Después se sucedería las ponencias Una vuelta al mundo escribiendo y Tres Américas, dos años y un sueño, las cuales me pierdo por coincidir en horarios con los dos talleres a los que estoy apuntado.

Ambos talleres se quedan muy, pero que muy escasos de tiempo, es algo que tendrían que mejorar para las siguientes jornadas, del primero de los Talleres "Como hacer un buen blog de viajes" extraigo un par de ideas, aunque me termino quedando con la duda de si realmente dichas recomendaciones son tan importantes como argumentan, y me baso en grandes blogs que no siguen las prácticas dictadas en el taller.

El segundo taller Cómo preparar un gran viaje en bicicleta un tanto de lo mismo en cuanto a los tiempos, muy escasos, pero si salgo con la sensación de haber obtenido más información nueva y útil que del primero.

Ahora para la clausura de las jornadas solo nos resta la proyección del documental El Mundo en Bicicleta, pero antes nos presentan el proyecto de Cinecleta, quienes a través de un proyector accionado por pedales, llevan el cine a las partes más recónditas.

La oscuridad nos ofrece un mal enfoque pero se transmite la idea de una proyección accionada por los pedales.
Andoni Rodelgo y su pareja ausente en las jornadas, se llevan la gran ovación por la presentación de su documental.

En definitiva una buena mañana y tarde del sábado, muy bien organizado todo en general y para mi solo con un pero... "hay que dar más tiempo a los talleres".

Desde aquí con la ilusión de que Ruedas a Paseo pueda participar en más eventos y contaros como se desarrollaron, un abrazo para todos.

domingo, 3 de mayo de 2015

Jornadas de los Grandes Viajes

Tras el éxito de la primera y segunda edición regresan estas jornadas, para todos aquellos interesados en conocer de primera mano, con sus ponencias y talleres, los relatos y vivencias de aquellos que un día compraron un billete únicamente de ida. Sin duda un encuentro donde aprender de la experiencia compartida.

Como oí decir a uno de los ponentes en un vídeo de pasadas ediciones: "Hubo un día donde yo estaba sentado en el otro lado, ahí donde ahora vosotros estáis". De fijo que nos harán soñar con la posibilidad de embarcarnos en grandes aventuras, genuinas, propias, donde podamos sentir y experimentar lo enriquecedor de los lugares y las personas que en ellos habitan.

 El 17 y 18 de abril se celebraron en Barcelona y ahora toca en Madrid para el 8 y 9 de mayo. Hay conferencias, talleres y una exposición colectiva de fotografías de viajes.

Programa de las Jornadas
Si quieres más información al respecto la puedes conseguir directamente en la web Como preparar un gran viaje ¿Te apuntas? Ruedas a paseo estará allí para contaros de primera mano.

¡Ah, se me olvidaba! El aforo es limitado, pásate a partir del 4 de mayo por el Punto de reservas.

Hasta pronto.

viernes, 1 de mayo de 2015

¡Pues yo tengo frío!

A la propuesta de Oscar respondimos seis personas: Carla, Eugenio, Miguel, Millet, Yaiza y Yo, aunque en el último momento Millet se nos dio de baja: ¡Te hemos puesto falta de asistencia! 

Vamos llegando poco a poco al puerto de Canencia. Hace frío, pero albergamos la esperanza de que las nubes se disipen y comience a calentar el Sol, descargamos, montamos las ruedas de las bicis y nos ponemos los cortavientos o chubasqueros para protegernos del aire cuando comencemos a rodar.

Pelotón al completo antes de salir
Comenzamos la ruta por el camino que parte de la Fuente de la Raja, tomando el GR10.1 e iniciamos la subida por los pinares de Canencia hasta el Collado del Hontanar.

Pista entre los Pinares de Canencia
Estamos frescos y da para ir charlando en la suave pendiente. Miguel como siempre me sorprende, aunque no se porque, ya debería estar acostumbrado, tanto tiempo que lleva sin pillar la bici y sube de impresión.

Poco después del collado iniciamos el descenso hacia la Majada del Cojo, y es un poco más adelante donde el track inicial marca a la izquierda, pero Eugenio nos recomienda que tomemos el camino de la derecha por el PR12. La verdad es que solo viendo la entrada llama a gritos, si el resto es así tiene que ser una pasada.

Descenso por el PR12
Más de una vez tenemos que parar, ya que el paisaje y lo espectacular del lugar invita a hacer fotos por doquier. Los árboles esta llenos de yemas que aún no han estallado, dentro de poco todo esto será un bosque frondoso, repleto de verdes refrescantes y claro oscuros del sol pasando entre las hojas. ¡Hay que volver para verlo!

Al fondo se divisa ya el bonito pueblo de Alameda del Valle, una vez en él rodamos por caminos tranquilos entre el Río Lozoya y la M-604 hasta Racafría.

Iglesia de Santa Marina, Virgen y Mártir de Alameda del Valle
Atravesamos y cruzando el Río de la Angostura y nos llegamos hasta el Puente del Perdón, donde paramos un rato para hacer la visita pertinente y tomar alguna cosa ligera antes de continuar camino.

Puente del Perdón
El Puente del Perdón que vemos fue el que sustituyo al inicialmente construido a inicios del s. XIV, deteriorado por las continuas crecidas del Río Lozoya, se erigió el actual a mediados del s. XVII y debe su nombre a que en este lugar era donde se juzgaban a los reos, si eran perdonados se libraban de la condena y regresaban sanos y salvos, en caso contrario los alguaciles les conducían hasta la casa de la horca. Aunque para mi el detalle más curioso es que este puente se utilizaba por los Monjes del Paular para llegar al Molino de papel de los Batanes, del cual salió el papel con el que se imprimió la primera parte de Don Quijote de La Mancha, publicada en Madrid en 1605.

Ahora salimos por el área recreativa de Las Presillas tomando de nuevo el GR10.1. Aquí Carla y yo nos ponemos en cabeza y hacemos una buena subida hasta el aparente punto más alto de la ruta ¡Menuda fiera Carla!

Tomando un descanso tras la continua subida
Luego ya hasta alcanzar el Refugio del Puerto de la Morcuera donde paramos a comer tranquilamente. El tiempo no se ha decidido a quitar la capa de nubes que nos separan del sol, que unido a la altura a la que nos encontramos y la brisa que llega, me mantiene en un estado estado entre helado y congelado, sobre todo ahora que estamos parados.

Entrada del Refugio de la Morcuera
Una vez que iniciamos el camino se ya va negociando el evitar una de las subidas. En el Collado de Hontanar algunos dicen que subirían, otros que bajaran directamente. Finalmente todos optamos por la vía directa, desde aquí era cuesta abajo hasta los coches, así que suelto los frenos rozándolos únicamente en las curvas cerradas.

Una vez abajo, aprovecho la ventaja para cambiarme y guardar la bici en el coche, momento en el que empieza a llegar el resto del grupo, unos pocos estiramientos y nos vamos a por la cerveza merecida, despidiéndonos antes de Eugenio que no nos acompañara.

Terraza Cañada 49 de Manzanares el Real.
El tiempo que hemos tenido desde que terminamos la ruta y mientras nos tomamos la caña ha sido el mejor del día. Esperemos que la próxima en la que saquemos las ruedas a paseo no me toque pasar frío.


Hasta la próxima.